Poeta colombiano nacido en Santa Fe de Antioquia en 1917 y fallecido en Medellín, en 1990. Licenciado en Periodismo y Humanidades, ejerció además la diplomacia y ocupó varios cargos públicos. Aunque fue conocido como El poeta de la raza incursionó en el tema sentimental.
RECUERDO
Te recuerdo en el llanto y en la risa;
en la estrella, en el verso y en la rosa;
en la opulenta copa que rebosa
y en el trozo de pan que se precisa.
En la luz que gastó la mariposa
para ser mariposa y no ser brisa;
en la tranquilidad que se improvisa
y en la diaria inquietud que nos acosa.
En la noche que sube hasta la frente;
en el cielo que alfombra cada fuente
y en el cielo ensatado en la oración;
en la angustia que rige cada paso;
en el rojo cansancio del ocaso,
y en el cansancio de mi corazón.
¡QUÉ HORRIBLE ES EL OLVIDO!
¡Qué horrible es el olvido!
Ver la mujer amada
Y no sentir que el alma
Se curva de dolor.
Cuando cerca a su nombre
No nos punza la espina,
Ya no vale la pena
Nuestra estéril canción.
¡Qué horrible es el olvido!
Saber que la quisimos
Y que sigue en la sangre
Sin producir dolor.
Cuando nos resignamos
A vivir con su ausencia,
Es porque ha envejecido
Por dentro el corazón.
Y entonces, ya la vida
No vale una canción.
♥♥♥
Bello lo que aún escrbe…unabrazo
Es verdad. Mil gracias Rubén por tu visita al blog. Otro abrazo para ti. 🙂
Todo es tan maravilloso:
«Como un cocuyo en la noche».
Verdaderamente poético Maestro. Mil gracias por su visita. 🙂
nunca se olvida amiga Gloria. que dos preciosos poemas. besos de tu siempre amiga Chari
Beautiful poems, so lovely.
Thanks you. A hug.
Precioso, veo que tenemos similar gusto literario 🙂
saludos,
«Entonces, ya la vida no vale una canción», Poemon! Que lindo!
Ya esa clase de poemas no se leen. Mil gracias por visitar mi blog. 🙂